El próximo 4 de septiembre tendrá lugar el encuentro de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, el ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, y los líderes de las patronales y sindicatos mayoritarios para tratar la situación de estos expedientes.
A raíz de decretarse el estado de alarma, a mediados de marzo, como consecuencia de la pandemia del Covid-19, a muchos trabajadores se les aplicó un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). Esta paga tuvo como objetivo garantizar la supervivencia de las empresas, salvaguardando el empleo y protegiendo los derechos de los trabajadores. Aunque, con la llegada de septiembre, la retribución para ellos se va a ver reducida a la mitad a no ser que se produzca un cambio en la ley. Esta medida viene dada de la norma, que expone que, transcurridos medio año del cobro, la prestación se recorta.
Se acaba el verano y ya han pasado los seis meses desde que se desencadenase la crisis sanitaria en España y muchos trabajadores, todavía, no se han reincorporado a sus puestos de trabajo, se calcula que unos 700.000, según el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. Cabe destacar que durante los 180 primeros días de ERTE, la prestación es de un 70%, pero a partir del día 181 cambia y se reduce hasta el 50% de la base reguladora, es decir, no el salario, sino la media de las bases de cotización de los seis meses anteriores al ERTE . Ese descenso del tanto por ciento afecta a todos los trabajadores a los que no se les ha levantado el expediente, según avisan desde el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
Una medida que los sindicatos consideran injusta, por lo que van a exigir que no se recorten las cuantías de las prestaciones durante los próximos meses y hasta final de año. Las entidades sindicales estiman que es necesario mantener las cuantías vigentes en la actualidad, es decir, continuar en el 70% de la retribución para poder llegar a un acuerdo sobre la nueva prórroga de los ERTE. Por lo que la reunión del próximo 4 de septiembre será clave para que UGT y CC.OO se entiendan con el Gobierno y de esta manera, asegurar el salario de muchos trabajadores que siguen con el empleo suspendido.
Del mismo modo, sindicatos y patronal no contemplan un límite en la fecha y menos que sea hasta, solamente, final de año, si no que buscan una prórroga indefinida. En este sentido, el gobierno ve con buenos ojos esta idea, ya que, según palabras de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, “no se trata de poner fechas sino de hacer medidas eficaces”. En cambio, el problema puede surgir a la hora de decidir la ejecución de los ERTE, debido a que el Gobierno pretende hacerlo por sectores, encabezado por aquellos que estén más castigados por la pandemia, como el turismo. Mientras, los sindicatos piden que no se deje a nadie atrás y que las condiciones sean iguales para todos.
Asimismo, Lorenzo Amor, presidente de Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) y vicepresidente de La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), pide “dejar de darle más vueltas de tuerca porque hay dinero suficiente”. En referencia a los 21.300 millones que ha prestado Bruselas a España para financiar los ERTE y las ayudas a los autónomos.
En definitiva, Gobierno y agentes sociales se reúnen el próximo viernes 4 de septiembre con el objetivo de ampliar los ERTE garantizando el 70% del salario de los trabajadores. Unas negociaciones que, en principio, deberían ser sencillas debido a que hay predisposición por todas las partes para llegar a un acuerdo. Además, es un asunto de vital importancia para garantizar el bienestar económico de muchas familias españolas por lo que no se maneja otro escenario que no sea el del entendimiento.