El aumento en los precios del combustible por el alza del precio del petróleo, consecuencia de la guerra en Ucrania ha incrementado los precios de los tiquetes aéreos.
El director general de Ryanair, Michael O’Leary, prevé que la tarifa aérea media de la aerolínea aumentará diez euros y pasará desde 40 euros hasta los 50 euros en los próximos cinco años. Sin embargo, asegura que seguirá siendo muy barato y asequible a comparación de las otras aerolíneas.
Desde esta perspectiva se cree que la gente seguirá volando, pero que los clientes buscarán más ofertas a la hora de hacer la reserva de vuelo en compañías “low cost”. Adicionalmente, dada la estructura de las tarifas de las aerolíneas de bajo coste, con muchos recargos, sobre todo por el equipaje, podría elevar rápidamente el coste total de un viaje de ida y vuelta a varios cientos de euros.